Teatro Madrid: Señor B, cuando la ficción supera a la realidad, por Pelayo Muñiz

Hemos podido ver a Señor B en la Nave 73 en abril, con Mabel del Pozo, Borja Cortés, Lolo Diego, Juanma Díez Diego

Si soy sincero cuando uno oye algo de un proyecto sobre la guerra civil se pone un poco a la defensiva. No a la defensiva, porque no es tanto por el tema en sí como por el bombardeo mediático que el tema en sí ha supuesto desde hace tiempo. Por lo cansadxs que muchxs dicen estar al respecto. (¿Pero es real?)

Porque de verdad…

¿Hemos visto tantas pelis sobre la guerra civil?

¿Verdad que no?

¿Y obras de teatro?

Yo hasta ahora, siendo sincero, ninguna…

(Nota: me viene muy bien este paralelismo entre realidad y ficción). 

Dicho esto, “Sr B (Algunos desastres de una guerra”) es una propuesta “hermosa”. Hermosa en el sentido de que Juanma, el autor (el real que está en escena haciendo de sí mismo), se plantea escribir sobre el asesinato de un familiar cercano ocurrido en agosto de 1936. Y mientras se imagina cómo puede empezar ese monólogo, se van colando en escena personajes que se rebelan contra él, que cambian el curso de los acontecimientos o prueban nuevas formas de enfrentarse al texto y a lo que ocurrió realmente… 

Y en ese ir y venir de personajes, la mayoría entrañables cuando no abiertamente cómicos, es imposible no emocionarse, como cuando Juanma habla con su abuelo y recuerdan expresiones y momentos compartidos en el pasado.

Yo al menos me emocioné porque aunque las palabras del abuelo no fueran las mismas que las del mío, podía entender los cuerpos, los afectos, las miradas, las manos que se tocan…

Bravo por esa mezcla de realidad y ficción, de no saber o no tener muy claro dónde empieza una y acaba la otra. Bravo por esos personajes que se rebelan, que quieren decirle al autor qué quieren contar u ocultar, bravo por una propuesta “hermosa”, por ser política sin aparentarlo, por ser tierna y a ratos cómica, y aunque todo el elenco está muy bien…

Bravo por Mabel del Pozo que me ha parecido una actriz muy bestia y muy hipnótica con una fuerza y a la vez una vulnerabilidad apabullantes. 

Bra-vo.

Mención especial al uso del humo en la puesta en escena, que a veces da pie a imágenes de lo más expresivas y estéticas. 

Estén atentxs para verla cuando vuelvan a Madrid, que seguro que lo hacen. 

Merece mucho la pena. De verdad de la buena.