El Festival de Otoño rinde su particular homenaje al dramaturgo Sanchis Sinisterra con la programación de El Lector por horas los días 24, 25 y 26 de noviembre / Con dirección de Carles Alfaro, cuenta con Pep Cruz, Pere Ponce y Mar Ulldemolins como reparto / La producción llevada a cabo por el Teatro de La Abadía, la Sala Beckett de Barcelona y el Institut Valencià de Cultura continuará con funciones en La Abadía hasta el 17 de diciembre
Tras la buena acogida de El lector por horas en La Sala Beckett de Barcelona, el espectáculo ideado por José Sanchis Sinisterra, y dirigido por Carles Alfaro, llega al Teatro de La Abadía. Coproducida por la Sala Beckett de Barcelona, el Institut Valencià de Cultura y Teatro de La Abadía, El lector por horas supone el regresode José Sanchis Sinisterra al escenario de La Abadía, tras Éramos tres hermanas (Variaciones sobre Chéjov) en 2014, también con Alfaro como director, o Flechas del Ángel del Olvido, que escribía y dirigía. Ahora el tándem Sinisterra – Alfaro regresa con esta propuesta que habla sobre el poder seductor y evocador de la literatura.
Durante la presentación a los medios, el director artístico de La Abadía, Juan Mayorga comentaba: «Esta representación de El lector por horas es un «no homenaje» a José Sanchis Sinisterra. Él es un creador, un agitador, un pensador y un maestro. Es un creador fronterizo y uno de los autores más influyentes de las tres últimas décadas. Es un agitador porque vive en una permanente juventud, en una especie de adolescencia, creando espacios. Es un pensador porque piensa sobre el hecho escénico. Y es un maestro de muchos autores y de muchas autoras creadores».
Sobre la obra, el director de La Abadía añadía que «una y otra vez –durante el espectáculo, pero también después de él–, El lector por horas reclama al espectador que lea y escriba. Y este es, precisamente, el asunto de la obra: la imposibilidad de leer sin escribir. Pocos como José Sanchis Sinisterra son capaces de tejer el texto en el espectador y no ante él. Logra que cada espectador se convierta en autor».
El arte de la palabra y la lectura
Escrita en 1996, El lector por horas se estrenó en el Teatre Nacional de Catalunya en 1999. Sin embargo, este particular homenaje de Sanchis a la literatura y a su perversa capacidad evocadora y creadora de realidades, pedía desde hace años volver a ser visto en un escenario (y sobre todo escuchado, tratándose de lo que se trata). Dicho y hecho, porque la propuesta entusiasta de Toni Casares, director de la Sala Beckett al director artístico de La Abadía, Juan Mayorga, llevó hacia adelante las ganas de recuperar uno de los textos más sugerentes del autor.
«Cuando hablábamos Juan y yo sobre la necesidad de recuperar este texto lo que sobrevolaba en nuestras cabezas era la disminución de la capacidad lingüística en los últimos años. Esta obra, precisamente, tiene que ver con la literatura y en ella Sanchis nos habla de la capacidad creativa del lenguaje. Por eso es muy importante que una obra como El lector por horas esté en las carteleras de nuestro país», comentaba Toni Casares durante el encuentro con los periodistas. «Dos casas como la Sala Beckett y La Abadía teníamos el deber de reconocer la figura de Sinisterra, dramaturgo, pedagogo y activista y una figura fundamental para el teatro catalán, español e iberoamericano» añadía.
Junto a ellos se han sumado al proyecto el Institut Valencià de Cultura, que coproduce la obra, y el Festival de Otoño que, de hecho, será quien presente esta obra en Madrid por primera vez los días 24, 25 y 26 de noviembre en el Teatro de La Abadía. «Para el Festival de Otoño es una alegría tener a Sinisterra como broche de oro del festival. El lector por horas es un capital de nuestra dramaturgia. ¡Qué bien que volvamos a este repertorio! Es un texto humanista que exige una gran responsabilidad de los espectadores», aseguraba Alberto Conejero, actual director del Festival de Otoño, durante el encuentro.
A partir del 27 de noviembre y hasta el 17 de diciembre, El lector por horas seguirá representándose en La Abadía tras su aclamado paso por la Sala Beckett, la cual ha dedicado el ciclo completo ‘Tardor Sanchis’ (‘Otoño Sanchis’) a la figura de Sanchis Sinisterra, fundador de esta casa teatral barcelonesa. Por su parte, Carles Alfaro, que ya estuvo en La Abadía con Jose K, torturado regresa ahora en la importante labor de dirección de esta obra por la que siente que «soy un agradecido por que hayan pensado en mí. El lector por horas es una obra muy compleja, difícil, en la que la confianza en el escuchante es fundamental. Es una pieza culmen de Sanchis a la que uno no debe asirse del todo», afirmaba. «Cada escena está concebida como una isla que se interconecta una con otras hasta crear un archipiélago. Es un viaje poco habitual para los intérpretes».
Tres grandes intérpretes
Este viaje literario está protagonizado por tres nombres importantes de la escena teatral: Pep Cruz, Mar Ulldemolins y Pere Ponce. Celso (Pep Cruz) contrata a Ismael (Pere Ponce) para que lea novelas en voz alta su hija, Lorena (Mar Ulldemolins), que ha perdido la totalidad de la visión en sus ojos. Será a través de la oralidad de Ismael como Lorena irá creando una nueva realidad visible. Una obra sobre los libros, la lectura, el poder creador de las palabras y la importancia del otro en la forma de afrontar la vida.
Poco a poco, la pieza se adentra en un perverso y enigmático juego metatextual, donde se entremezclan los límites entre realidad y ficción. ¿Quién lee a quién? ¿Qué intenciones esconde cada texto? ¿Cuál es, en realidad, la verdad del argumento? ‘El lector por horas’, que traslada a la ficción algunos de los presupuestos teóricos de la estética de la recepción, es uno de los textos más relevantes de la obra de José Sanchis Sinisterra.
En este triángulo, Pere Ponce debe adoptar una labor enunciativa neutral en contraste con la gran expresividad poética de los textos escogidos. «Hemos respetado mucho el texto, la palabra. Creemos que el espectador va a ser muy capaz de desentrañarlo», afirmaba el actor en su intervención. A él se sumaba la actriz Mar Ulldemolins para añadir que «es una obra que no tiene una lógica binaria. Son personajes con muchas aristas y maneras de actuar. Son incómodos para el espectador y para nosotros, por eso debemos trabajarlos desde el inconsciente, desde el presente». Por último, Pep Cruz terminaba diciendo «creo que Sanchis es un juguetón. Nos pasa la pelota al espectador constantemente e interpela al público diciéndole ‘suéltese'».
Una partitura bien orquestada
Al duelo interpretativo se suma la escenografía, dirigida por Luis Crespo, junto a Carles Alfaro. Este último también se encarga de la iluminación y junto al espacio escénico otorgan a la representación teatral de un cierto aire de atmósfera noir, con ese juego de luces y sombras. A ello se añade la composición musical de Joan Cerveró y las proyecciones de Francesc Isern, que logran dotar de mayor dimensión a la lectura de los textos y sus imágenes evocadoras.