Ganadoras del Premio Ariel: 65º edición, ciclo de cine en la Casa de México en Madrid del 31 de Enero al 02 de Marzo de 2024
Desde su creación en 1947, los Premios Ariel de la Academia Mexicana (AMACC) han sido un marco indispensable para escribir la historia del cine mexicano año tras año, así como un escaparate ideal para difundirlo en el mundo de habla hispana; su 65ª edición, en 2022, rompió varios precedentes históricos. Para muestra: en las categorías de Mejor película, Dirección, Ópera prima, Dirección de arte y Guion original, cuatro de las cinco nominaciones correspondieron a mujeres al frente de sus propias historias.
Una de ellas fue la ganadora de la noche: El norte sobre el vacío, tercero y esperado largometraje de la potosina Alejandra Márquez Abella después de la fulgurante cinta Las niñas bien en 2018. Se trata de un western amargo y emocionante ambientado en Nuevo León -al norte del país-, que pone en tela de juicios los roles tradicionales de hombres y mujeres cuando una familia de terratenientes se enfrenta a una situación límite.
El Ariel a Mejor dirección -entre otras ocho estatuillas- celebró el regreso al cine mexicano de uno de sus más destacados hijos pródigos, Alejandro González Iñárritu, quien en la inclasificable y confesional Bardo: falsa historia de unas cuantas verdades firmó su primera película nacional desde ese destello atronador que fuera Amores perros en el año 2000, ópera prima que cambió el rumbo del cine latinoamericano a inicios de siglo.
Bardo mereció también el premio a Mejor actor para uno de los intérpretes mexicanos más destacados del país, Daniel Giménez Cacho (Zama, La mala educación), mientras el premio a Mejor actriz fue para una leyenda e institución en el cine contemporáneo del país: Arcelia Ramírez (La mujer de Benjamín, Perfume de violetas), quien atraviesa las llamas y un dolor innombrable en La civil para contar la historia de una -o miles- de madres en busca de hijas desaparecidas en América Latina.
Entre las sorpresas del año, destaca el debut de dos directoras jóvenes. Huesera de Michelle Garza Cervera utiliza los códigos del cine de horror corporal (body horror) para tejer una punzante reflexión sobre maternidades, sororidad y la pervivencia de ritos ancestrales en la cultura mexicana. Tras un aluvión de premios en festivales como Tribeca, Sitges o Morelia, Huesera recibió cuatro premios Ariel incluyendo Mejor guion y Ópera prima.
Trigal, de Anabel Caso, nos traslada a los inmensos campos de trigo en Sonora durante un verano de sol inclemente en el que dos amigas transitan de la infancia a la adolescencia, en un entorno en donde la mirada masculina y el peso de la tradición parecen engullirlo todo. Con plena justicia, Trigal recibió las estatuillas por co-actuación femenina y a revelación actoral. Este rico panorama de debutantes se completa con Zapatos rojos, melancólico drama rural sobre la vejez y la pérdida. Es la ópera prima del potosino Carlos Eichmann, presentada en festivales como Venecia, Morelia, Málaga y nominada a cinco Arieles.
Ningún panorama del cine mexicano reciente estaría completo sin el documental y el cortometraje. Las ricas propuestas planteadas por Teorema de tiempo de Andrés Kaiser, Home Is Somewhere Else de Carlos Hagerman y Jorge Villalobos o Dioses de México de Helmut Dosantos no podrían ser más distintas: su riqueza está en esa diversidad. Usando técnicas tan distintas como el found footage, el documental animado o la etnografía, son ventanas hacia un país inabarcable y caleidoscópico cuya identidad es un crisol en evolución perpetua.
El ciclo no estaría completo sin la multipremiada Argentina, 1985 de Santiago Mitre, ganadora del Ariel como Mejor película iberoamericana o los sorprendentes ganadores a mejor cortometraje documental (Las nubes son de música, de Samuel Kishi), animado (El año del radio, de Enrique García Meza) y ficción (Agustina, de Luciana Herrero Caso) que acompañarán las proyecciones de Dioses de México, Home is Somewhere Else y Zapatos rojos, respectivamente.